Un espacio natural de senderos para descubrir la Vega Arrocera
Tras la «II Carrera Entre Arrozales», celebrada con todo éxito el pasado domingo 22 de mayo, el Ayuntamiento de Calasparra, el Consejo Regulador de la DO Calasparra, la Mayordomía de la Fundación Santuario y el colectivo «Calasparra se mueve» continúan con las Rutas del Arroz, ocho citas senderistas (primavera–otoño) para descubrir a otro ritmo los rincones naturales más valiosos de la Vega Arrocera.
Las rutas del arroz se unen a la categoría de senderos turísticos, ya que éstas forman parte de un conjunto de recorridos de importancia para uso senderista dentro del espacio natural de la vega arrocera de Calasparra y del cauce del Río Segura, donde la vegetación de ribera es protagonista junto al conjunto rupestre de los Abrigos del Pozo y el yacimiento arqueológico de Villa Vieja.
En función de su uso, las rutas se definen como rutas circulares de uso preferentemente pedestre, dentro de la modalidad de senderos de pequeño recorrido (PR), con uso compartido con otros usuarios como ciclistas de montaña y turismo ecuestre, durante los ciclos de siembra (Primavera/Mayo) y cosecha (Otoño/Septiembre–Octubre) del cultivo de arroz Calasparra.
Las próximas rutas propuestas son
Paisajes del Agua | Paraje el Bayo
Sábado 28 de Mayo y Domingo 29 de Mayo | 09.00 h
- Ruta guiada
- Cita: 09:00 h
- Lugar de encuentro: Estación de Ferrocarril (Zona Norte)
- Desplazamiento: en coche.
- Recomendaciones: calzado adecuado, crema sola, gorra, agua.
- Distancia: 6,25 Km
- Dificultad: Baja
- Niños: + 12 años
- Tiempo: 1 hora 20 minutos
- Precio 7 €
Itinerario paisajístico: Estación de Ferrocarril (1865) – Paraje del Puerto (sendero vega arrocera) – Molino Arrocero de Juan Haro (Flor de Calasparra 1990) – Paraje Presa del Bayo (Sendero vega arrocera) – Sotobosque (Ribera Río Segura)
A la sombra de la Sierra del Puerto
La ruta parte del Molino de Juan Haro, antiguamente denominado Cortijo del Puerto, el edificio en el que se produce una de las marcas locales de arroz bomba de calidad, Flor de Calasparra, hasta donde se llega por la carretera de la Estación y luego la carretera de El Bayo. El itinerario, circular, discurre por caminos de tierra enmarcados por acequias y portillos, arrozales, el cauce del río Segura, terreno forestal y bosque de ribera. Son poco más de 6 kilómetros durante los que oirá el discurrir del agua y paseará junto al mar verde cereal que, en octubre, se prepara para la siembra. Junto a pinos de enorme tamaño y un rico y variado sotobosque que se extiende al otro lado de la carretera, con retamas, lentisco, espartos, enebros, sabinas, espinos negros, pasearán entre la acequia y los arrozales, que ya frisan el final de su ciclo.
Casi en paralelo al curso del río, que dibuja sus habituales meandros, dirige sus pasos a la Presa de El Bayo, mientras, a su izquierda, el curso del Segura se intuye próximo a alamedas y choperas pobladas, que pronto empezarán a otoñar, que contrastan con las tierras margosas y peladas que rodean la cuenca en este tramo.
Los pájaros disfrutan alegres de este almarjal de inigualable belleza, en el que la mano del hombre ha ido transformando el paisaje con su acción secular. Así, las acequias de Rotas, Berberín y El Esparragal irrigan estos parajes desde antes del siglo XVI, constituyendo una vastísima red de hidráulica que saca el mejor fruto a estas tierras fertilizadas por los limos de las avenidas segureñas. El trino de las aves no deja de acompañar nunca al caminante, ni siquiera cuando los disparos para ahuyentar a la fauna resuenan con su cadencia lenta.
Después de algo más de 2 kilómetros de recorrido, llegarán a la Presa del Bayo. Allí, el croar de las ranas, los peces que saltan fuera del agua y el ensordecedor sonido del agua al caer con fuerza inundan todo y las olas de espigas se mecen al ritmo. Esta es zona tradicional de disfrute de los calasparreños, pero tengan especial precaución, pues el agua baja con mucha fuerza.
De vuelta al punto de inicio, pegados a la ribera del río, observen la avifauna. Las garzas, descaradas y de blanco radiante, pasean altaneras por las elevadas lindes de los campos de arroz. Lo mismo hacen las perdices, que tras darse un festín de insectos en los límites de los cultivos, marchan aceleradas, pero no asustadas, a ocultarse en el sotobosque de la sierra.
Desde el camino, observarán pronto, en la margen derecha del Segura, las superpobladas e inundadas choperas de la finca La Dehesa. En este tramo de ribera, las invasoras cañas se hacen fuertes donde flojea la sombra del bosque de ribera, con chopos y álamos blancos o plateados, fresnos, olmos, zarzas y rosales silvestres, granados, adelfas, hiedras, carrizos y juncos. Entre el kilómetro 4 y 5 del itinerario, pasarán junto a un puente, desde el que pueden asomarse para tratar de observar la fauna piscícola y la bóveda arbórea que cubre el Segura en este tramo. Precisamente en este punto, si cruzan el río, pueden seguir el GR-127 que se interna en los sotos y bosques de ribera de Cañaverosa. Sin embargo, nuestro itinerario continúa por la margen izquierda hasta la acequia que, remontando su curso, lleva al paseante, de nuevo, hasta el Cortijo del Puerto o Molino de Juan Haro para dar por terminada la caminata.
Ruta de los Espejos | Visita a los Abrigos del Pozo
Viernes 10 y Sábado 11 de junio | 20.00 h
- Ruta guiada.
- Cita: 20:00 h
- Lugar de encuentro: aparcamiento restaurante “La Curva” (Zona Norte)
- Desplazamiento: en coche.
- Recomendaciones: calzado adecuado, agua, linterna o frontal LED, repelente de mosquitos.
- Distancia: 6,1 Km ruta circular.
- Dificultad: Baja
- Niños: + 12 años
- Tiempo: 1 hora 45 minutos
- Precio 7 €
- Inscripción: https://app.sporttia.com/events/3911
Itinerario paisajístico: Acequia centenaria del Esparragal (siglo XVII), Paraje de las Hoyicas (Sendero – Vega Arrocera), Pinos monumentales – Puente del Esparragal, Paraje del Soto de la Boquera. (Sendero – Vega Arrocera), Abrigos del Pozo – Paraje Cañón de Almadenes – Orilla Río Segura (Conjunto Rupestre – Patrimonio de la Unesco)
Te imaginas un paseo al atardecer, para disfrutar de increíbles rincones naturales iluminados por la luz de la luna en plena vega arrocera .
Vuelve la “Ruta de los Espejos, una cita cargada de experiencias y sonidos para escuchar la naturaleza, en un entorno mágico cómo Los abrigos del Pozo (Patrimonio de la Unesco)
¡Descubrirás paisajes que nunca hubieras pensado qué podrían situarse tan cerca de ti!
Los espejos de los arrozales
La domesticada vega de la Segura más indómita; una aproximación a los orígenes del hombre entre brotes de arroz bomba.
Hace apenas dos semanas que las plantaciones de forraje y habas con que los agricultores calasparreños devuelven la vida a las tierras agostadas, para prepararlas para una nueva siembra, han sido sustituidas de nuevo por el arroz bomba, que ahora da comienzo a un nuevo ciclo. Con las cajas llenas del agua limpia que el Segura lleva en su curso alto, las máquinas han ayudado al hombre a batir la tierra y permitir la siembra a voleo de la simiente. Unas semillas que, una temporada más, permitirán que el nombre de Calasparra llegue a todos los rincones del globo como primer arroz con Denominación de Origen y que el Ayuntamiento quiere dar a conocer entre los habitantes de toda la Región, pero también entre los turistas de fuera que se acerquen hasta aquí. No en vano, como en otros paisajes culturales, el ‘patchwork’ que hoy se observa desde lo alto en las riberas segureñas es fruto de la historia y la tradición que han ido labrando los calasparreños.
La ruta propuesta por la Oficina de Turismo estará acompañada por la banda sonora del musical movimiento del agua, la que circula a toda velocidad por la acequia del Esparragal, impecablemente recta en algunos tramos y serpenteante en otros, y que, siempre en movimiento, va derramándose de caja de arrozal en caja de arrozal. Una peculiaridad que, frente a otras zonas productoras, le otorga a este cereal, un alimento básico en la mayor parte del mundo, una calidad excepcional: agua limpia y en constante movimiento, que regresa, para no desperdiciar ni una gota, de nuevo al curso del río tras ser aprovechada por estos cultivos.
En los primeros compases de estos campos, las cajas son balsas de espejuelos que reflejan las bellas luces del atardecer y el amanecer. Junto a la Casa de las Hoyicas, un antiguo cortijo con horno moruno, el canto de los pájaros sirve de toque de salida para el inicio del recorrido. En silencio, por los caminos de tierra que son lindes de las parcelas, el croar de las ranas permite disfrutar de un concierto natural que llega a resultar ensordecedor.
Hasta que, antes de que medie junio, los brotes de los primeros tallos de este cereal tiñan de verde las ‘piscinas’ y los agricultores dejen secar las cajas para abonar la tierra y volverlas a llenar, el agua limpia permite asomarse a esas balsas temporales en las que habitan numerosos cangrejos, que, por desgracia, ya no son los autóctonos de río, sino los rojos americanos que han invadido la vega y se han hecho con el nicho ecológico de los locales. Unos cangrejos que, aunque invasores, sirven de alimento a las aves que sobrevuelan la zona, se posan para descansar y detectar nuevas presas y se lanzan en picado a la caza, sobre todo, de los mosquitos que abundan.
Por el paraje del Macaneo y la margen derecha del Segura, entre el río y el Camino del Esparragal, se dibuja este itinerario en el que los carrizos y juncos que delimitan los campos parecen mecerse al compás que marca la banda sonora de la naturaleza, al tiempo que el espectáculo de luces se crece en los reflejos del agua. En compañía de guías y absorbiendo las explicaciones, solo deben preocuparse de poner alerta los sentidos para disfrutar este paisaje cultural capaz de sorprender en cada una de las fases del cultivo del arroz con estampas diferentes.
Tras respirar naturaleza, oler a resina de los pinos que crecen en las inmediaciones y observar la fauna que habita este paisaje antropizado pero con inmensos valores naturales, desde Calasparra invitan al visitante a acercarse a conocer los remotos orígenes del hombre con una visita a los abrigos del Pozo. El yacimiento, con numerosas pinturas rupestres de diferentes fases de ocupación, así como materiales de sus distintos habitantes primitivos, permite recorrer 8.000 años de evolución humana, descubrir lo que la historia geológica desvela sobre este paisaje y comprender cómo este rincón privilegiado de la Región de Murcia se convirtió, desde la prehistoria, en un punto de encuentro social. Una aproximación al pasado milenario que, apta para personas con movilidad, garantiza una entrada en primera fila a los secretos que va desvelando la arqueología.
II Arrozales Race Calasparra
Sábado 18 de Junio | 9.00 h (registro de equipos)
- Cita deportiva
- Lugar de encuentro: Escuela de piraguïsmo
V vuelta a la Sierra del Puerto 47K +690
Sábado 13 de agosto | 22.00 h
- Senderismo nocturno
- >> Ruta nocturna que rodeará en su totalidad la Sierra del Puerto, largo enclave montañoso que comparte Calasparra con Cieza en su parte más alta, el Cabezo del asno, durante la luna llena de Agosto
- www.bladerunnerscalasparra.com
Ruta paraje Soto de la Boquera (La siega)
Domingo 16 de octubre | 09.00 h
- Ruta guiada
- >> Son muchas las razones para visitar la vega arrocera en pleno otoño
- Lugar de encuentro: aparcamiento restaurante “La Curva”
- Precio: 7 €
Ruta Paraje del Bayo (La siega)
Domingo 23 de octubre | 09.00 h
- Ruta guiada
- >> Una cita matinal para ser testigos de la tradicional siega del arroz
- Lugar de encuentro: Estación de Ferrocarril de Calasparra
- Precio: 7 €