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Movilización en la Capital: Agricultores Murcianos Protestan en Defensa de sus Intereses.
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Desafíos en el Campo: Marcha Reivindicativa para Abordar Políticas Agrarias Estatales y Europeas.
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Lucha por Recursos Hídricos: Tema Central en la Manifestación ante el Ministerio de Agricultura.
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Presión en Bruselas: Ministros de Agricultura de la UE se Reúnen para Abordar Demandas del Sector.
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Voces de Esperanza: Líderes Agrarios Buscan Adaptación de Normativas a la Realidad del Campo.
Doce autobuses y numerosos vehículos particulares han viajado desde la Región de Murcia hasta Madrid, con el propósito de permitir la participación de 800 ciudadanos murcianos en una manifestación que tuvo lugar este lunes en la capital española. Esta protesta se llevó a cabo en defensa de los intereses de agricultores, ganaderos y pescadores, quienes enfrentan desafíos significativos en sus explotaciones y embarcaciones.
La manifestación comenzó a las nueve de la mañana con la salida de 100 tractores desde el Puente de Arganda, programados para liderar la protesta. Sin embargo, la columna se dividió en el camino, resultando en la intercalación de los vehículos agrícolas entre los demás manifestantes. Todos se congregaron en la estación de tren de Atocha, frente al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.
Desde las instalaciones del Ministerio, los manifestantes emprendieron una marcha hacia la oficina de la Comisión Europea en Madrid. Recorrieron el Paseo del Prado, el Paseo de Recoletos y conectaron con el Paseo de la Castellana, hasta llegar al número 46, donde se encuentra la sede en España del ejecutivo comunitario.
Mientras la protesta tenía lugar en Madrid, el ministro de Agricultura, Luis Planas, se encontraba en Bruselas participando en una reunión del Consejo de la Unión Europea sobre Agricultura. En esta reunión, se buscaba llegar a un «gran pacto europeo por nuestros agricultores y medio rural» en respuesta a los desafíos que enfrenta el sector a nivel europeo.
Planas señaló que la reunión se estructuraría en tres bloques de propuestas. El primero abordaría la simplificación administrativa, contemplando la eliminación o limitación del uso de fotos georeferenciadas y la reducción de los controles sobre explotaciones de menos de 10 hectáreas. El segundo bloque trataría la directiva de prácticas comerciales desleales, incluyendo los problemas relacionados con la venta a pérdidas. Por último, se discutiría la exigencia de cláusulas espejo para productos no autorizados en la Unión Europea. A pesar de las adversas condiciones climáticas en Madrid este lunes, se llevó a cabo la manifestación que representa el cierre de un mes de protestas convocadas por las organizaciones agrarias COAG, Asaja y UPA. Cerca de cien tractores y alrededor de 20,000 personas se congregaron frente al Ministerio de Agricultura en una marcha reivindicativa que busca ser un punto de inflexión en las políticas agrarias estatales y europeas.
En la cabecera de la manifestación, los agricultores de la comarca del Altiplano se han posicionado estratégicamente para demandar riegos de socorro y el fin de las ventas a pérdidas. El agua ha sido un tema central en este acto, evidenciado por la presencia de varios jornaleros murcianos sosteniendo carteles que destacan la importancia de los recursos hídricos accesibles para la supervivencia del sector primario, incluso en medio de las condiciones climáticas adversas.
Mientras tanto, en Bruselas, los ministros de agricultura de la Unión Europea se reunieron para abordar algunas de las promesas realizadas en los últimos días. Temas como la aplicación de cláusulas espejo a productos de terceros países, la reducción de trámites burocráticos y la flexibilización de las normas ambientales comunitarias ocupan un lugar destacado en la agenda, siendo objeto de atención y presión por parte de los manifestantes en Madrid.
En declaraciones a La Verdad, Miguel Padilla, secretario general de COAG a nivel nacional, expresó su esperanza de que las reivindicaciones sean aceptadas y que las normativas se adapten a la realidad del campo. «Debe haber una parte importante de nuestras exigencias que no deben quedarse en un cajón», subrayó Padilla.
El final de esta «histórica» protesta tendrá lugar en la Oficina de la Comisión Europea, ubicada en el corazón del paseo de la Castellana, donde los manifestantes esperan hacer oír sus demandas de manera efectiva.