La estudiante del IES La Flota se codeará con talentos de toda España en la XIV edición de un certamen que reparte becas por más de 33.000 euros y abre las puertas de una de las escuelas de gastronomía más prestigiosas del mundo
La pasión por los fogones y la disciplina en la cocina han llevado a Ana González Carrillo, estudiante del IES La Flota de Murcia, a convertirse en una de las 50 jóvenes promesas seleccionadas para participar en la XIV edición del Premio Promesas de la Alta Cocina, convocado por Le Cordon Bleu Madrid. Tras un riguroso proceso de preselección entre cientos de candidaturas de todo el país, su nombre figuró en la lista oficial publicada este lunes, convirtiéndola en la única representante de la Región de Murcia en esta fase del prestigioso certamen.
El concurso, dirigido a alumnos menores de 25 años que cursen el último año de su formación reglada en hostelería y gastronomía, persigue no solo reconocer el talento emergente, sino también impulsar su desarrollo profesional mediante una apuesta decidida por la excelencia formativa. En esta edición, los participantes provienen de 30 centros educativos distribuidos en 20 provincias, con Andalucía (12 candidatos) y la Comunidad Valenciana (10) liderando la representación autonómica. Junto a Ana, también compiten aspirantes de Aragón, Castilla y León, Galicia, Cataluña, Madrid, Navarra, Canarias, Baleares y otras regiones, reflejando la diversidad geográfica y culinaria del talento español.
La próxima etapa del certamen, clave para acceder a la gran final, consiste en la elaboración y presentación de una vídeo-receta de máximo cinco minutos, que deberá ser enviada antes del 15 de enero. Aunque el pliego de condiciones establece una materia prima común y técnicas específicas, los concursantes gozan de autonomía creativa para incorporar productos de su entorno —una invitación implícita a que Ana, por ejemplo, pueda hacer brillar los sabores de la huerta murciana—. La originalidad, la ejecución técnica, la presentación y la coherencia conceptual serán evaluadas por un jurado de expertos de Le Cordon Bleu, si bien el público también tendrá voz: a partir del 20 de enero, todos los vídeos se publicarán en el canal de YouTube del premio y en su aplicación oficial, permitiendo una votación popular cuyo peso se sumará al criterio profesional.
El 23 de febrero se conocerán los 10 finalistas, quienes viajarán a Madrid para disputar la gran final en abril, en las emblemáticas cocinas del centro formativo. Allí, bajo la atenta mirada de un jurado integrado por figuras de renombre nacional —como los chefs Joan Roca, Andoni Luis Aduriz o Martín Berasategui en ediciones anteriores—, deberán crear un plato sorpresa con ingredientes impuestos, poniendo a prueba su técnica, su temple y su visión gastronómica.
Los dos primeros clasificados recibirán becas integrales para cursar estudios en Le Cordon Bleu Madrid: la primera dotada con 24.000 euros y la segunda con 9.000 euros. Además, el centro educativo del ganador absoluto será premiado con una ayuda de 1.500 euros, en reconocimiento al papel formativo de los docentes y las instituciones que nutren el ecosistema culinario del país.
Más allá de los premios económicos, el certamen se erige como un puente entre la formación reglada y la excelencia profesional. Desde su lanzamiento hace catorce años, ha servido de trampolín para decenas de jóvenes que hoy trabajan en cocinas de renombre nacional e internacional. La edición anterior fue ganada por María Bazar Verdes, del CIFP Paseo das Pontes (A Coruña), bajo la presidencia del jurado del chef dos estrellas Michelin Javier Olleros.
En un contexto en el que la gastronomía se consolida como pilar cultural, económico y turístico de España, iniciativas como esta subrayan el compromiso de Le Cordon Bleu con la sostenibilidad del talento: no basta con descubrirlo; hay que cultivarlo, acompañarlo y, sobre todo, darle voz. Ana González, con su nombre ya entre los 50 elegidos, no solo defiende su sueño particular, sino también el potencial de una región que, más allá de su legado agrícola, está forjando una nueva generación de creadores del sabor.
Aquí puedes consultar la lista de los 50 elegidos.
Y en la cocina, como en la vida, a veces basta una fresa, un huevo y una idea para que todo comience a cambiar.
