Ha contado con la participación de 400 artistas, danzas de todo el mundo y un cierre pirotécnico frente a la Catedral
El festival ha combinado tradición y contemporaneidad a través de las actuaciones musicales en la Plaza del Cardenal Belluga, que congregaron a más de 3.500 espectadores; un concierto del artista Albaladj, que reunió a más de 300 asistentes; dos jornadas de seminarios con la participación de más de 100 personas, y una ruta guiada por la ciudad en la que tomaron parte más de 70 participantes
Durante esta semana, Murcia se ha convertido en el epicentro del folclore internacional con la celebración de la 57ª edición del Festival Internacional de Folklore del Mediterráneo, que ha contado con la participación de cerca de 400 artistas procedentes de distintos puntos del mundo.
Una amplia programación de actividades culturales y folklóricas ha movilizado a más de 4.000 personas a lo largo de los distintos actos programados.
El festival ha regresado un año más al corazón de la ciudad con su tradicional escenario en la Plaza del Cardenal Belluga, que en esta edición ha adquirido un significado especial con motivo del 1.200 aniversario de la fundación de Murcia. Cada noche, frente al imafronte de la Catedral, se han sucedido diferentes danzas tradicionales y folklóricas procedentes de lugares como Senegal, India, Bulgaria, Lugo o Zaragoza, junto a agrupaciones regionales como Coros y Danzas Francisco Salzillo, congregando a más de 3.500 asistentes.
El festival dio comienzo con el tradicional izado de banderas en la Plaza del Cardenal Belluga, seguido del encendido de la Antorcha de la Amistad en el pebetero con el fuego simbólico del 1.200 aniversario. A continuación, tuvo lugar una de las actuaciones más esperadas del programa: el espectáculo ‘Palomo Cojo‘, del artista El Pantorrillas.
Entre las principales novedades de esta edición destacó el concierto del artista ALBALADJ, celebrado el pasado 17 de julio, que ofreció una propuesta musical innovadora al fusionar el folk con las nuevas tendencias sonoras, atrayendo a más de 300 personas y abriendo espacio a la música contemporánea dentro del festival.
Asimismo, la programación ha incluido un enfoque académico con dos jornadas de seminarios celebradas en el Museo Hidráulico de los Molinos del Río, que contaron con la asistencia de más de 100 personas. Los encuentros estuvieron protagonizados por investigadores como Joaquín Gris, Carolina Palencia, Raúl Guirao y Pedro Leandro, quienes abordaron temáticas como la tradición de los auroros o el papel de la dulzaina en el folclore murciano. Como complemento, se llevó a cabo una visita guiada por la ciudad en la que participaron más de 70 personas.
El festival concluyó con un gran broche de oro: la última actuación conjunta de todos los grupos participantes, tanto internacionales como nacionales y regionales, seguida de un espectáculo de pirotecnia que puso el cierre a esta intensa y celebrada edición del festival.