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GASTROCRONICAS

Francia recibe a los grandes vinos españoles

El mundo redescubre Jumilla y atiende la excelente oferta de nuestro país


 

El III Salón de los Grandes Vinos de Biarritz convoca veinte grandes marcas


 

Por Helena Molero


 

Una veintena de bodegas españolas, entre las que se encuentran García Carrión y Félix Solís han participado en el Salón de Grandes Vinos de España, celebrado el 10 de junio en el Hotel du Palais de Biarritz. En su tercera edición, el Salón de Biarritz ha tenido como objetivo presentar la oferta de una selección de bodegas españolas a profesionales franceses para incrementar la presencia de los vinos españoles en el mercado, en particular en la región de Nouvelle Aquitaine.

Este encuentro ha servido también para conocer de primera mano las principales virtudes y fortalezas de nuestras grandes bodegas como Marqués de Vargas, Protos, Begoña Jovellar (de reciente creación y vinos excelentes), Bodegas Petra Merino (con el plus añadido del arte), Bodegas Mendi, o García-Carrión y sus vinos de Jumilla, una D.O. emergente e imparable en el panorama nacional e internacional.

El cónsul español en Biarritz, Fernando Carderera, con la enóloga Julia del Castillo, organizadora del Salón de Grandes Vinos de España en Biarritz.

En el exclusivo Hotel du Palais se dieron cita sumilleres, responsables de restaurantes y hoteles, de compras de tiendas especializadas y de cadenas de alimentación. Organizado por la enóloga Julia Castillo, este evento es una decidida apuesta por la promoción de los vinos españoles en el exterior. El marco elegido para promocionar los vinos españoles fue el salón imperial del Hotel du Palais de Biarritz; palacio construido por Napoleón III como regalo a su mujer, la española Eugenia de Montijo, como residencia de verano.

Amagoia Urteaga, de Bodegas García- Carrión.

El cónsul español en Biarritz, Fernando Carderera, subrayó la importancia de España como potencia vitivinícola, siendo el tercer productor y exportador mundial, y líder en vino ecológico, además de su contribución a la imagen positiva de España”.

Los vinos de Valdepeñas “Pata Negra”, en sus diferentes gamas, fueron mostrados por parte de Bodegas García-Carrión, junto a otras denominaciones de origen del grupo como, Jumilla, Rioja, Ribera del Duero y Toro, y Penedès.

Próspero García Ayala, de Bodegas Félix Solís, subrayó la presencia y las exportaciones de su empresa, especialmente en Francia. Destacó la importancia del evento para atraer clientes de hostelería del País Vasco, sur de Francia y Las Landas, aprovechando su filial en Burdeos, que funciona como plataforma logística para la distribución en Francia y el comercio con Estados Unidos.

Magnífico vino del Marqués de Vargas, Selección privada Hacienda Pradolagar 2017.

España es el tercer suministrador de vinos a Francia, aumentando cada año las importaciones de vino embotellado español en este país. Así, se confirma el reconocimiento de las excelentes calidades de los vinos españoles y de sus precios competitivos.

Los vinos que se muestran en el Salón de Biarritz tienen una probada calidad, reconocidos a nivel nacional e internacional, con puntuaciones superiores a 90 puntos sobre 100 en prestigiosas guías internacionales.

La enóloga Begoña Jovellar presentó sus vinos de gran calidad de Ribera del Duero y Rueda.

Las bodegas participantes tienen una probada reputación por su trayectoria a través de los años. Proceden de diferentes regiones de España y cada uno de sus vinos exhibe con exactitud el pago, el terroir y el ecosistema microclima-suelo donde se ha desarrollado la variedad de uva de la que proceden.

Entre otras elaboraciones, el Grupo García-Carrión presentó en Biarritz un Jumilla Monastrell, 2019 (Bodega la Ermita). “Creemos que tiene un proceso de evolución en botella que atrae mucho a los amantes del vino de guarda”, explica Amagoia Urteaga. En su opinión, el vino de Jumilla a nivel nacional se está redescubriendo, está de moda, una D.O emergente que sorprende a todos”.

El viñedo se encuentra a 700 m de altitud, “característica muy buena para la zona ya que nos permite conservar un poco esa diferencia de temperatura entre el día y la noche sin que sean excesiva”, añade Amagoia.



García-Carrión, ejemplo de sostenibilidad

El grupo García-Carrión ha demostrado ser un ejemplo de sostenibilidad. La empresa se preocupa por minimizar su impacto ambiental, incluso en detalles como el papel de las etiquetas. Anteriormente, utilizaba un papel cuyo reciclaje implicaba un largo proceso y un transporte considerable, generando una alta huella de carbono. La directora de sostenibilidad del Grupo, Virginia Muriel, encontró un proveedor que ofrece un papel con un proceso de reciclaje más rápido, un menor impacto ambiental y un menor peso, lo que permite transportar más etiquetas con menos emisiones. Este cambio, aunque aparentemente pequeño, tiene un impacto significativo a gran escala debido al volumen de producción.

El artista Cveto Marsic junto a los vinos de Bodega Petra Merino.

La nobleza y el vino

Don Pelayo de la Mata, el marqués de Vargas en persona presidió su amplio stand dedicado a los vinos que elabora: Rioja, Ribera del Duero y Albariño. Originario de la zona de La Rioja, el marqués de Vargas ha sabido diversificar su inversión e interés, llegando a elaborar verdaderas joyas vinícolas, fruto de unas tierras cuidadas con mimo durante generaciones y una sabiduría del viñedo transmitida también durante siglos.

En sus bodegas riojanas, el Marqués de Vargas tiene Selección privada Hacienda Pradolagar, 2017 nombre que tiene este viñedo singular y que ha presentado también en el Salón de Biarritz. Esta distinción del consejo regulador es similar al concepto francés de Grand Cru, por la calidad especial de las uvas que producen, influidas por factores como la ubicación, la insolación y el terroir. Este viñedo se encuentra al final de la Rioja Alta, a la altura de Logroño. Se elabora con tempranillo, mazuelo y garnacha. El mazuelo es la variedad que más identidad aporta en estructura y longevidad. Es un vino potente, pero también sutil y es elegante.

La familia de don Pelayo posee también tierras y título nobiliario en la zona de Peñafiel, donde también se ha asentado el grupo con éxito en el Pago de Valdespino. De ahí parte la bodega Conde San Cristóbal, que fue oidor de la Real Chancillería de Valladolid. Se trata de viñedo histórico donde ya se cultivaban vides durante la época de Felipe II.

El grupo de bodegas de don Pelayo de la Mata se ha extendido también por Galicia, con la creación de la marca de Pazo de Santo Mauro, en plena D.O. Albariño, para elaborar un vino original y de gran calidad. Reconoce don Pelayo que Rueda hizo una gran labor para que el consumidor español, y especialmente el femenino, se incorporara al consumo de vino. “Al Marqués de Riscal le atribuyo el haber puesto Rueda donde está. Con su bodega y el verdejo, que era la variedad histórica de Rueda, además introdujo el Sauvignon Blanc.

“Estuve comparando Rueda con Galicia y vi que Galicia en la DO Albariño, era una zona de menos competencia en ese momento. Entonces, compramos otro viñedo histórico en Galicia, con el que se fundó la bodega Pazo de San Mauro, un viñedo situado en la provincia de Pontevedra.

Eduardo Escudero, director comercial de Bodegas Proto.

Begoña Jovellar y la excelencia de su vino

Bodegas Jovellar estuvo también en Biarritz para mostrar un vino excelente, elaborado por Begoña Jovellar, una de las grandes mujeres de la enología en España y en el mundo. Más de treinta años en bodegas legendarias, como Vega Sicilia, dan peso a cada elaboración suya. En el salón imperial del Hotel du Palais de Biarritz se mostró Begoña Jovellar, 3º año 2022. Ribera del Duero. Tempranillo 100% criado en barricas de roble. Vino envolvente y elegante. También “Begoña Jovellar 2022 de Rueda, verdejo 100%, fresco y estructurado.

Begoña Jovellar es mucho más que una etiqueta: es una declaración de intenciones donde entra la la elegancia, la exquisitez y la búsqueda continua de la excelencia. “Estamos elaborando una cantidad pequeña que podemos llamar vino de autor porque realmente es una maravilla elegir los mejores viñedos y el máximo cuidado para hacer el mejor vino posible”, comenta Begoña.

Bodega Petra Merino, arte en la botella

Sus vinos son puro arte, desde el vino hasta sus etiquetas que son creaciones del artista contemporáneo Cveto Marsic. Están dirigidos a un público que busca autenticidad y calidad. Se elaboran en la histórica Tierra de Campos de León, una región marcada por siglos de tradición vitivinícola. Los viñedos, casi centenarios, están ubicados en Gordaliza del Pino (León). Desde la Edad Media, esta tierra ha estado íntimamente ligado al vino bajo la influencia de la Abadía de Cluny.

Juanchu Mendieta y Carmen Martínez de Osaba junto a la marca de su bodega familiar.

Bodegas familiares y singulares

Juanchu Mendieta y su esposa, Carmen Martínez de Osaba, lideran su particular bodega Mendieta Osaba, ubicada en la Rioja Alavesa. Es la primera vez que acuden al Salón de Biarritz. La bodega está dentro de la D.O.Ca Rioja, pero mantiene su libertad elaborando vinos en sus viñedos singulares: “Apostamos por la calidad, el sitio donde vienen las uvas, la tierra donde estamos, la orientación y particularidad de cada parcela”. “No vamos de la mano de dar la clasificación por tiempo que ha estado en barrica, sino darle valor a la tierra. La bodega es de mis abuelos, luego pasó a mi padre y ahora me toca a mí llevar el peso”. Sobre la celebración del centenario de la D.O. Ca Rioja, Juanchu sugiere que “se tienen que acordar también de las bodegas pequeñas porque a veces nos sentimos un poco olvidados”. El delicioso diseño de la etiqueta, realizado por Carmen Martínez de Osaba, con tres figuras femeninas, impulsadas por unas aves como si fueran globos, es expresión del aire fresco que pretende dar la bodega a sus elaboraciones.

Protos y su pedagogía del rosado

Bodegas Protos es la primera visita que hace al Salón de los Grandes Vinos Españoles en Biarritz. Reconoce Eduardo Escudero, su director comercial, que esta zona de Francia tiene mucha influencia española. Por ello, la bodega cuenta con dos importadores.

Presenta las tres gamas, tinto, rosado y blanco. Sobre este último, Verdejo 2021 y Cuvée Verdejo, Eduardo nos habla de su compleja elaboración. “En nuestra bodega de blancos solamente utilizamos la fermentación en mosto yema. En ambos hacemos fermentación nocturna y la extracción en frío. El verdejo hacemos su fermentación alcohólica en acero inoxidable y está tres meses de crianza en lías. En cuanto al Cuvée el viñedo es ecológico, y la extracción es algo más corta. Además, tiene una crianza más larga, de seis meses en lías, de los cuales es un 10% lo hace en huevo de hormigón y otro 10% en fudre de madera. “El resultado es más salino, mineral y gastronómico, quizá menos fresco, con una acidez más corregida; es un vino más largo en boca”, según define Escudero.

El rosado es el vino más difícil de elaborar. Bodegas Protos se instaló en 2020 en Cubillas de Santa Marta (Valladolid) para iniciar la elaboración de grandes rosados.” Elegimos este lugar para plantar viñedo propio y porque es una zona donde podemos jugar con muchas variedades. El rosado Cigales tiene seis variedades diferentes de uva: tempranillo, garnacha, albillo, verdejo, viura, cabernet y sauvignon blanc”.

Eduardo saca pecho para explicar que “no hay ninguna otra zona en España que lleve toda esa cantidad de variedades de uva en un solo Rosado; movemos el 7% del rosado, somos recientes, somos jóvenes”. Considera que lo importante para el vino es el viñedo en sí. Y añade: “un vino, un buen rosado de Cigales, necesita tener un precio. Para ese precio la bodega buscará buena uva y pagará buen dinero por ella. Si el viticultor recibe buen dinero por la uva va a cuidar la viña”. Opina que “en Cigales no sé si la viticultura, las bodegas o el mercado, cometió un error de marketing, de no saber vender las cosas”.

En su opinión, “no podemos hacer un vino que pase sin pena ni gloria; hay que hacer un buen vino y una buena presentación. La tendencia se genera cuando hay un movimiento grande de prescripción: “Cuando realmente digamos que los rosados no es que sean bonitos de color, que son un espectáculo de color, sino que el producto es un gran producto muy distinto a un blanco y un tinto”. Considera que “la nueva cocina que ahora mezcla puntos de salados con dulces es muy difícil de maridar con vinos solo blancos o solo tintos”. Ahí está el espacio del Rosado: La cocina asiática: japonesa y tailandesa. Los maridajes tienen que ir o por contraste o por afinidad. “Y el rosado puede hacer las dos cosas a la vez”, subraya Eduardo Escudero.

Conquistar vinos con la gastronomía

Los italianos con la pasta y la pizza, con multitud de restaurantes en todo el mundo, han encontrado su espacio para maridar con los vinos que producen, según explica Escudero. “Cuando tú dominas el canal de distribución tienes ventaja y dominas la venta. Creo que la gran potencia gastronómica que es España, deberíamos de aprovecharla más”.

 

Helena Molero es periodista

 




 


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