Un queso artesanal de Zarcilla de Ramos se alza con el Super Gold como mejor queso de cabra del planeta en los World Cheese Awards 2025 —única representación española entre los 14 finalistas de 5.244 piezas internacionales
En pleno corazón de la alta huerta lorquina, en la tranquila pedanía de Zarcilla de Ramos, se ha gestado un hito gastronómico de resonancia global: Hechizo, un queso de pasta blanda elaborado con leche pasteurizada de cabra murciano-granadina, ha conquistado la máxima distinción en su categoría en los World Cheese Awards 2025, celebrados en Berna (Suiza). El galardón no solo le otorga la medalla Super Gold, sino el título indiscutible de mejor queso de cabra del mundo, tras superar una competencia sin precedentes: 5.244 muestras procedentes de 46 países.
Organizado desde 1995 por el Guild of Fine Food, este certamen —considerado la olimpiada mundial del queso— reunió este año a 264 expertos internacionales que, tras una cata a ciegas rigurosa, redujeron la selección a solo 14 finalistas. Entre ellos, Hechizo fue el único representante español. Su victoria fue estrecha y vibrante: apenas nueve puntos separaron al campeón absoluto del octavo puesto, posición que ocupó el queso murciano en el ránking general —primero, eso sí, dentro de la categoría de leche caprina.
Detrás de esta pequeña pieza, de aspecto humilde y sabor deslumbrante, está La Zarcillera, una quesería familiar nacida hace apenas cinco años, cuya filosofía se resume en tres verbos: criar, cuidar, elaborar. Alfonso Pérez-Muelas, maestro quesero y alma de la empresa, no oculta la emoción: «Estamos eufóricos. Apenas hemos cumplido medio lustro y ya vemos cómo nuestro ‘Hechizo’ se abre paso entre gigantes de la tradición quesera mundial».
Y es que Hechizo no es un queso convencional: madura entre 25 y 35 días, se elabora pieza a pieza, con manos expertas y sin automatismos, y se nutre exclusivamente de la leche de su propio rebaño —cabras criadas en libertad, alimentadas con pastos autóctonos que impregnan al producto de una identidad territorial irrepetible.
Pero su verdadero encanto radica en su dualidad sensorial: «Sin corteza —explica Pérez-Muelas— es untuoso, cremoso, casi meloso; con corteza natural y comestible, irrumpe una intensidad eléctrica, un estallido de matices que transforma la degustación en una experiencia casi teatral. Es, literalmente, dos quesos en uno».
Este triunfo no llega por sorpresa, sino como coronación de un ascenso sostenido: bronce en 2021 y 2024, plata en 2023 en el mismo certamen internacional y, este mismo año, plata en el Campeonato de los Mejores Quesos de España. Cada medalla ha sido un jalón en una trayectoria que redefine lo que significa artesanal: no solo técnica, sino narrativa, territorio y emoción.
Mientras el sector lácteo español celebra este logro colectivo —la primera vez en años que un queso español se sitúa entre los más destacados del podio mundial—, en Zarcilla de Ramos ya se trabaja en silencio, entre cubas y cámaras de maduración, con la misma dedicación de siempre. Porque, como concluye Alfonso, «nosotros no fabricamos quesos: tejemos momentos, uno a uno, con leche, tiempo y pasión».
En un mundo donde lo industrial amenaza con homogeneizar los sabores, Hechizo es una declaración de resistencia sensorial… y un hechizo que, una vez probado, ya no se olvida.
El campeonato, que se celebra desde 1995, ha reunido 5.244 quesos procedentes de 46 países de los cinco continentes. Un jurado compuesto por 264 expertos ha sido el encargado de seleccionar los 14 mejores quesos del año, entre los que Hechizo destacó como único queso español finalista. Finalmente, obtuvo el título de mejor queso de cabra del mundo y el octavo puesto absoluto del certamen, con apenas nueve puntos de diferencia respecto al primero.
Reconocido en ediciones anteriores
Hechizo ya había sido reconocido en ediciones anteriores: bronce en 2021 y 2024, plata en 2023 y plata en el Campeonato de los Mejores Quesos de España 2025.
Se trata de un queso de pasta blanda elaborado con leche pasteurizada de cabra y maduración de entre 25 y 35 días.
«Estamos pletóricos, muy contentos. Este tipo de reconocimientos refuerza nuestra filosofía de elaborar los quesos uno a uno, a mano y con leche de nuestras propias cabras, afirma Alfonso Pérez-Muelas, maestro quesero y gerente de La Zarcillera.
El secreto de Hechizo está en su doble personalidad:
«Si lo pruebas sin corteza es un queso fundente y meloso; si lo pruebas con corteza, que es natural y comestible, es una explosión de sabor, totalmente diferente», explica Alfonso.
La quesería, de carácter familiar, trabaja con cabras murciano-granadinas criadas en libertad, alimentadas con pastos locales que reflejan el sabor de la tierra.
«En nuestra quesería hacemos algo más que producir queso: elaboramos experiencias. Trabajamos sin prisas, con precisión y dedicación artesanal, para que cada pieza hable de tradición, oficio y pasión», concluye su gerente.
Con este nuevo galardón, Murcia vuelve a situarse en el mapa mundial del sabor, demostrando que la artesanía y la calidad de sus productos pueden competir (y ganar) entre los mejores del planeta.
