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GASTROCRONICAS

La Casa de la Luz revive el esplendor medieval con la cena en honor a Doña Jamila, la primera cirujana de Murcia

Casi un centenar de comensales viajaron al siglo XIV para redescubrir una historia olvidada entre platos sefardíes y música tradicional


 

La noche del lunes 23 de junio, el conocido Restaurante La Casa de la Luz, ubicado en Zarandona (Murcia), y que antaño fue una fábrica de seda, se transformó en un enclave del Murcia del siglo XIV, acogiendo una cena inmersiva dedicada a Doña Jamila, considerada la primera mujer cirujana reconocida oficialmente por el Concejo de Murcia en 1371.

Organizada por la catedrática de la Universidad de Murcia María Trinidad Herrero, esta experiencia formó parte del ciclo Cenas Temáticas Murcia 1.200, dentro del proyecto «Murcia, piel y memoria – Ilustres historias«, que busca rescatar figuras claves del pasado local e integrarlas en la vida cultural contemporánea.

El evento reunió a casi un centenar de personas, entre académicos, doctores, cirujanos, periodistas, artistas, representantes institucionales y amantes de la historia murciana.

LasGastrocronicas.com asistió al evento para realizar esta amplia galería fotográfica:

Un brindis por la igualdad… desde hace más de seis siglos

El acto comenzó con un cóctel en los jardines del restaurante, donde los asistentes pudieron disfrutar de un entorno mágico antes de pasar al salón principal.

Allí, bajo la luz de las velas y rodeados de piezas artísticas medievales, se sirvió un menú inspirado en la gastronomía sefardí, cocinado con ingredientes autóctonos y reinterpretado con técnicas modernas, como homenaje a los sabores del periodo.

Los platos incluyeron:

APERITIVO DE BIENVENIDA

  • Palitos de berenjena rebozados con miel
  • Filikas Empanadillas rellenas de queso y huevo
  • Keftedes de Prasa Buñuelos de puerros
  • Vahtes/Garato Tosta de sardinas en aceite
  • Diadjik Sopa fría de yogur con pepino y menta
  • Tosta de boquerones en vinagre

MENÚ

Al centro

  • Aceitunas aliñadas, ajos macerados y cebollitas
  • Berzas con queso, huevos revueltos y verduras cocinadas
  • Ensalada especial Sefardí
  • Pastel de berenjenas con cebolla, huevo y queso rallado

Individuales

  • Bacalao con salsa de ciruelas con col y remolacha
  • Milhoja de cabrito lacado en miel con judías verdes y calabacír

Postre

  • Torrija rellena de crema con miel salsa de arrope e higos secos

Bodega

  • Vino blanco, Vino tinto
  • Cervezas, refrescos, aguas, café.

Este recetario, elaborado con rigor y creatividad, fue acompañado por el dúo musical Hispania verso y madera, especializado en recuperar melodías y textos medievales, que ofreció un repertorio envolvente con instrumentación y lenguaje de la época.

Ocho mesas, ocho miradas al pasado

Las mesas estaban divididas en torno a temáticas relacionadas con la vida y obra de Doña Jamila, creando un entorno pedagógico y participativo:

  • Murcia en el siglo XIV”: con Celestino Avilés, Clemente Casado Mateos, María Ascensión Carreño (concejala de la ciudad), Gregorio Mármol (periodista de La Verdad ), y otros destacados intelectuales.
  • Medicina en el siglo XIV”: liderada por figuras como Francisco Cantabella, Eduardo Martínez de la Cuesta y Pedro Mateo.
  • Murcia Sefardí”: con Mabel Campuzano, Ginés Gómez Méndez y Fernando Méndez, entre otros.
  • Maimónides”: con la propia organizadora, María Trinidad Herrero , junto a Antonio Piñero Madrona, Ricardo Robles y Virgina Izura Azanza.
  • Vida y obra de Doña Jamila”: protagonizada por Laura Campoy Gómez, Marlene Gómez Morales y Ana Martínez-Peñalver.
  • Cirugía en el siglo XIV”: mesa compuesta por Miriam Abellán, Beatriz Febrero y Maye Soriano.
  • Gastronomía sefardí en Sefarad”: con Giannela Bonomi, Víctor López y Ainhoa Vera Guerrero.
  • Música sefardí”: encabezada por Candela Altabe, Guillermo Parra y Renata Parra.

Durante la velada, se leyeron fragmentos de poemas y recetas históricas, mientras se distribuían textos interpretativos sobre las prácticas médicas, rituales judíos y la arquitectura de la época, logrando así una experiencia verdaderamente multisensorial.

Más que una cena… una lección de identidad

La profesora Herrero aseguró durante su intervención que «Doña Jamila no solo representa un logro médico, sino también una ruptura social» y recordó cómo ya entonces, en el corazón de la Edad Media, Murcia era tierra de avances sociales y culturales, abierta al intercambio de conocimientos entre cristianos, judíos y musulmanes.

La figura de Maimónides también tuvo presencia en las conversaciones, gracias a la mesa dedicada a su legado filosófico y médico, mientras se hablaba de cómo sus teorías aún hoy tienen influencia directa en la práctica de la salud.

Además, muchos de los asistentes acudieron vistiendo indumentaria medieval o sefardí, reforzando la atmósfera de inmersión temporal. Muchos lo hicieron, logrando un ambiente único, cargado de simbolismo y conexión emocional con el pasado.

Un aplauso al pasado que nos habla del futuro

Con esta cena, Murcia no solo celebra su pasado… lo rescata, lo siente y lo cocina con cariño.

¿Te perdiste la cita? No te preocupes: el ciclo continúa en julio con Ibn Arabí, y promete nuevas noches de sabores, saberes y sentimiento.

Porque en Cenas Temáticas Murcia 1.200, cada plato tiene nombre, cada nota tiene voz y cada historia tiene lugar en la mesa.

¡Nos vemos en la próxima! Donde el tiempo no pasa, solo se detiene para cenar.



 

De la adafina a las filikas: sabores que resistieron el tiempo en la cocina sefardí de Murcia

En la Murcia del siglo XIV, durante un periodo marcado por la convivencia entre culturas, la gastronomía sefardí ocupaba un lugar central en la vida cotidiana y festiva de la comunidad judía asentada en la ciudad. Más que una forma de alimentarse, era una expresión de identidad, fe y mestizaje culinario, donde cada plato contaba una historia de raíces profundas y adaptación al entorno.

La cocina sefardí local, ajena aún a los productos del Nuevo Mundo, se sustentaba en ingredientes autóctonos de la huerta murciana y en técnicas transmitidas de generación en generación. Regida por los preceptos de la kashrut, esta dieta evitaba el cerdo, separaba estrictamente lácteos y carnes, y exigía sacrificios rituales para el consumo animal (shehitah), reflejando una profunda espiritualidad en cada bocado.

Uno de los platos más representativos era la adafina o hamín, un guiso elaborado a base de garbanzos, benincasa, arroz, hortalizas de temporada, cordero y huevos cocidos, que se preparaba el viernes antes del ocaso y se dejaba cocer lentamente toda la noche. Este potaje denso y aromático no solo cumplía una función nutricional, sino también religiosa: permitía disfrutar de comida caliente sin violar la prohibición de encender fuego durante el shabbat.

Otro protagonista en la mesa sefardí era la berenjena, reina indiscutible de la huerta murciana. De ella surgían recetas tan icónicas como el almodrote, una pasta hecha con berenjenas asadas, cebolla, huevo y queso rallado, gratinado con aceite de oliva virgen extra y horneado con paciencia. Las frituras de calabaza, calabacín y berenjena eran también frecuentes, junto a las llamadas filikas, empanadillas rellenas de queso, huevo y especias dulces o picantes, ideales para ocasiones especiales.

El pescado, fundamental en días de ayuno y celebración, solía prepararse en escabeche, salazón o ahumado, y se servía especialmente los viernes, en una fusión sutil entre tradición hebrea y costumbre cristiana. El bonito y el bacalao marinados, así como las ensaladas frescas de tomate, lechuga y pepino, ofrecían equilibrio y frescura a las comidas más cargadas de cuerpo.

Las sopas frías, como el antecesor del actual gazpacho o una versión del djadjik –similar al tzatziki–, mezclaban yogur, pepino y hierbas locales, logrando un efecto refrescante en los días más calurosos. Estos platos demostraban cómo lo ritual podía adaptarse a lo práctico, sin perder ni un ápice de su esencia.

En repostería, el uso de almendra, miel y frutas de la tierra era habitual. Se elaboraban compotas de manzana y dátiles (haroset), similares a las mermeladas actuales, además de pasteles fritos endulzados con miel, precursores de las torrijas mediterráneas. Cada festividad traía consigo una receta simbólica: las orejas de Amán, típica masa frita en forma de oreja, se hacían en Purim; los panes ácimos (mazzot) acompañaban la celebración de Pésaj, vinculados a la memoria histórica del pueblo judío.

Un legado que trascendió fronteras

Aunque fiel a sus orígenes, la cocina sefardí en Murcia no permaneció inalterada. Su interacción constante con la gastronomía andalusí y cristiana enriqueció su repertorio con nuevas especias, métodos de conservación y presentaciones más elaboradas. Así, el uso del aceite de oliva como grasa principal, el gusto por guisos lentos y la combinación de sabores dulces y salados fueron influencias compartidas que terminaron integrándose en la cultura culinaria local.

Esta fusión cultural se hizo patente no solo en las casas particulares, sino también en los fogones públicos, donde algunos de estos platos comenzaron a circular fuera del ámbito estrictamente comunitario, llegando incluso a ser apreciados por vecinos de otras creencias.

Entre la mesa y la memoria

Para los sefardíes de la época, comer era mucho más que una necesidad: era rito, memoria y celebración de la vida, un acto de resistencia y creatividad en un mundo cambiante. La cocina se convertía así en espacio de encuentro familiar, de transmisión oral y de continuidad cultural en medio de un paisaje social complejo.

Hoy, en pleno 1.200 aniversario de la fundación de Murcia, estas recetas y sabores reaparecen en proyectos como Cenas Temáticas Murcia 1.200, donde chefs y estudiosos reinterpretan la gastronomía medieval para acercarla al paladar contemporáneo.

Porque en Murcia, desde hace siglos, ya se sabía que el sabor une a la gente… y que la historia también puede probarse.

¿Te imaginas sentarte a comer en una casa de Zarandona allá por 1371?

Con este tipo de iniciativas, no solo se revive el pasado… se lo degusta.

Murcia revive su pasado medieval con una cena en honor a Doña Jamila, la pionera cirujana del siglo XIV.

Datos clave:

  • 📍 Evento: Cena ‘Doña Jamila’ – Ciclo Cenas Temáticas Murcia 1.200
  • 📅 Fecha: Lunes 23 de junio de 2025
  • 🕘 Hora: A partir de las 21:00 horas
  • 📍 Lugar: Restaurante La Casa de la Luz – Zarandona, Murcia
  • 👨‍🍳 Menú: Gastronomía sefardí del siglo XIV
  • 🎶 Ambientación musical: Dúo Hispania verso y madera
  • 🎟 Precio cubierto: 50 euros
  • 👗 Etiqueta sugerida: Vestimenta de época



 


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