Para dar visibilidad al problema de la ordenanza municipal de los 7 metros la patronal ha puesto en marcha una campaña que también desarrollará velatorios en los locales de ocio nocturno y una procesión de pijamas
La parca se cierne sobre el ocio nocturno de Murcia debido a las consecuencias de la ordenanza municipal de los 7 metros. Esa triste realidad está escenificando este fin de semana la Federación Regional de Empresarios de Hostelería y Turismo (HoyTú), que desarrolla una perfomance donde la muerte -personalizada en dos actores debidamente ataviados- se está paseando con su guadaña y su lúgubre aspecto por las calles murcianas para recordar esa fatalidad que se cierne sobre el ocio nocturno murciano.
Una campaña para dar visibilidad a su situación y que durante tres fines de semana desarrollará diversas acciones en los establecimientos nocturnos y en las calles de la ciudad. Su objetivo: narrar la cronología de la muerte anunciada del sector del ocio nocturno de la capital.
Sin locales nuevos y con pérdida de empleos
La patronal viene reclamando al Ayuntamiento de Murcia desde 2017 actualizar esta medida incluida en la ordenanza municipal de protección del medio ambiente contra la emisión de ruidos y vibraciones. Una disposición que prohíbe poner música más allá de las 00:00 horas en locales ubicados en calles con menos de 7 metros de ancho y que solo afecta a los locales del grupo 2 (bares especiales).
“La medida es del año 2000, cuando había herramientas de insonorización menos eficientes que un cuarto de siglo después. Se impone una revisión a fondo que conlleve su eliminación, como han hecho en Lorca”, solicita Jesús Jiménez, presidente de HoyTú. “Somos la única ciudad de España con limitación de actividad por el ancho de las calles en locales perfectamente insonorizados”, recuerda.
Ante esta situación en una ciudad donde el 53% de sus calles tienen menos de 7 metros, la creación de nuevos locales de este tipo es nula. “En los últimos 11 años no se ha producido ni una nueva apertura en el centro de la ciudad”, informa la patronal, que apunta que esta ordenanza afecta a 17 locales, aproximadamente el 50% de toda la ciudad, prácticamente todos ellos en el centro del casco urbano.
A estos datos se une otro demoledor y muy preocupante. Con la aplicación de esta ordenanza y la consiguiente reducción de los horarios de apertura, los locales de ocio nocturno han perdido cerca de un 40% de sus plantillas.
El sector se echa a la calle
La cronología de la muerte de la noche murciana continuará el próximo sábado 24 de mayo con la representación del “velatorio” de los negocios que se están viendo afectados y que en sus propios locales celebrarán esta despedida a partir de las 00:00 horas, con ataúdes incluidos y abierta a su clientela.
Para concluir la trilogía el sábado 31 de mayo se celebrará por el centro de Murcia -también a partir de las 00:00 horas- la “procesión de los pijamas”. En ella sus integrantes se vestirán para la ocasión y alumbrarán con velas su recorrido en el que portarán los ataúdes de los locales afectados.
“Queremos mostrar que nuestros negocios están muriendo. Buscamos que los ciudadanos se den cuenta de lo que está pasando, que nos apoyen ante las autoridades y nos ayuden a mostrar esta situación que hará de Murcia una ciudad con un centro sin vida y turísticamente acabada. Un futuro que ya está aquí y que afecta al resto de la hostelería e incluso a la ciudadanía, que tendrá un entorno sin actividad y que podrá incluso volverse peligroso”, señalan desde la patronal.