El 16 de junio celebra una tradición que une sabor, amistad y cultura: el tapeo murciano, desde la marinera hasta el zarangollo
Hoy se celebra en toda España el Día Mundial de la Tapa, una iniciativa promovida por Saborea España con el objetivo de visibilizar y reivindicar esta costumbre tan nuestra como universal. En Murcia, la tapa no solo es un acompañamiento del vaso: es protagonista, es historia, es identidad y, sobre todo, es experiencia compartida.
Bajo este espíritu, los bares de la Región han querido rendir tributo a lo mejor de su oferta culinaria en miniatura, proponiendo clásicos como la marinera, el matrimonio, el zarangollo, la hueva y mojama, o el pulpo al horno, entre otras especialidades que forman parte del ADN gastronómico local.
Un ritual de sabores y encuentros
La tapa siempre ha sido más que un simple bocado: es puente entre desconocidos, excusa para quedarse charlando una hora más, y símbolo de cómo la comida puede ser diálogo, sorpresa y memoria.
En Murcia, el tapeo tiene personalidad propia. Aunque las influencias regionales están presentes, aquí hay platos que se han convertido en míticos, tanto en el centro como en pedanías. Basta con cruzar el puente de la rambla de Espinardo, pasear por Santa Eulalia o acercarse a La Ñora para descubrir cómo cada barrio tiene su estilo, su receta y su manera de servirla.
Las tapas más representativas de la tierra
Durante esta jornada, muchos locales han decidido recuperar o reinterpretar algunas de las tapas más emblemáticas de la región, aquellas que hablan por sí solas de la huerta, del mar y de la tradición oral:
- Marinera: El clásico indiscutible. Ensaladilla rusa, rosquilla crujiente y anchoa del Cantábrico encima. Variaciones como el marinero (con boquerón) o la bicicleta (solo ensaladilla) también han tenido su hueco.
- Matrimonio: Dos ingredientes, uno encima del otro. Anchoa sobre boquerón. Sencillez y equilibrio perfecto en cada bocado.
- Pulpo al horno: Tierno, ligeramente ahumado y servido con aceite, pimentón y una rodaja de lima al lado. Muy presente en los mercados, tabernas y coctelerías urbanas.
- Caballito de gamba: Gamba rebozada en harina y frita, servida en pincho de pan. Ideal con cerveza fresca o vermut artesanal.
- Zarangollo: Frito de calabacín, patata, cebolla y huevo, cocinado sin prisas, fiel reflejo de la huerta mediterránea.
- Michirones: Guiso de habas secas con chorizo o tocino, típico de temporadas frías pero siempre bien recibido por los amantes de lo contundente.
- Hueva y mojama: Huevas de mújol y lonchas finas de atún seco, perfectos para abrir boca con cerveza o txakoli.
- Almejas a la marinera: Almejas abiertas al vapor con toque de tomate y hierbas. Una de las tapas que mejor representa la cercanía del Mar Menor.
- Patatas con limón, aceitunas y pimienta: Simpleza aparente, pero gran complejidad sensorial. Es una de las tapas más originales y reconocibles de la Región.
- Jamón y queso: Siempre presente en cualquier carta, ya sea ibérico, de bellota o curado de cabra. Un clásico que nunca falla.
Además, otros platos como el chiquillo (embutido murciano), el pisto, los caballitos de gambas, las ensaladillas rusas, el jamón de la mar o la fritura de chirretes del Mar Menor han estado hoy especialmente destacados en muchas cartas, como forma de celebrar esta festividad con sello local.
Origen de una tradición universal
Aunque el origen de la tapa se remonta a leyendas centenarias —como la del Rey Alfonso X El Sabio, quien ordenó acompañar el vino con un trozo de jamón para evitar la embriaguez rápida—, lo cierto es que en Murcia, el tapeo se ha convertido en una práctica arraigada que va más allá del trago. Se come de pie, se comparte entre amigos y se degusta con tiempo, porque una buena tapa no se devora… se disfruta.
Según explica Asociación Saborea España, impulsora del evento: «La tapa no solo es una forma de comer, sino una forma de vivir. Es cultura, es territorio, es arte de la improvisación y del saber hacer».
Y es por eso por lo que se está trabajando para incluir las tapas dentro del Patrimonio Cultural Inmaterial de España, junto a manifestaciones como la Trashumancia o la Semana Santa.
¿Cómo se celebra?
Este año, muchos establecimientos han optado por ofrecer menús especiales, concursos de tapas, degustaciones gratuitas o incluso rutas por distintos bares, animando a vecinos y turistas a conocer la ciudad a través del paladar.
Restaurantes, gastrobares y tascas de toda la Región han participado activamente, desde Quiosco Ben Arabi, El Rincón De Tomás (en Espinardo), El Tío Sentao, hasta Cucü Food Experience, pasando por La Tavernica del Ranero, Loro Azul, Mar de Sal o La Cornamusa, donde el tapeo se vive como auténtica celebración.
Además, el hashtag #DiaMundialDeLaTapa ha inundado redes sociales, con fotos, videos y recomendaciones de los clientes habituales. Y no falta quien propone nuevas versiones, fusionando productos autóctonos con técnicas modernas, pero respetando siempre la esencia del tapeo: comer poco, compartir mucho y hablar más.
¿Buscas plan para esta noche?
No hace falta ir más lejos: Coge un grupo de amigos, busca tu bar favorito y empieza a recorrer el mundo de la tapa murciana. Porque si algo nos enseña el tapeo es que lo pequeño también puede ser grande… si está lleno de alma.
¡Feliz Día Mundial de la Tapa!
En Murcia, la tapa no se celebra solo hoy…
se vive todos los días.
Datos clave:
Celebración: 16 de junio de 2025 – Día Mundial de la Tapa- Participación: Bares, restaurantes y espacios gastronómicos de Murcia y comarca
Tapas más populares en la Región: Marinera, Matrimonio, Zarangollo, Pulpo al horno, Caballito, Hueva y Mojama, Michirones, Patatas con limón y aceitunas
Hashtag oficial: #DiaMundialDeLaTapa
Redes: Muchos locales han publicado menús y ofertas en Instagram y Facebook
