Carrefour pondrá a la venta en sus supermercados de Francia test rápidos de COVID-19
Sus tiendas en España quedan fuera de esa posibilidad, ya que la comercialización de este tipo de productos queda restringida por ley al ámbito sanitario
La cadena suministrará en Francia un millón de autotest para detectar el coronavirus. Aquí en España, por el contrario, el ritmo de vacunación sigue siendo muy lento y las vacunas no se distribuyen fuera del sistema de salud habitual.
La cadena de supermercados Carrefour anunció ayermiércoles que venderá en sus supermercados de Francia hasta un millón de test rápidos para detectar el coronavirus. Se suma de este modo a retailers como Lidl o Aldi, en este caso en Alemania.
De este modo, según publica Food Retail, «el retailer ofrecerá en sus lineales pruebas de antígenos para detectar anticuerpos del SARS-COV-2, que permitirán a sus clientes comprobar si han estado infectados en las últimas semanas.
Se trata de una nueva cadena de distribución que se suma a esta venta que ya pusieron en marcha cadenas como Lidl o Aldi en Alemania o Biedronka en Polonia. En el caso de Alemania, la oferta va más allá y la cadenena Lid vende ya no sólo las pruebas de antígenos, sino también aquellas que detectan la presencia del coronavirus mientras la pandemia de COVID-19 aún está en curso».
Carrefour ha informado de la próxima puesta a la venta de estos test rápidos de antígenos a través de un mensaje en sus redes sociales, avisando de que los test nasales pronto estarán disponibles en las tiendas Carrefour del país galo. Se han pedido 1 millón de pruebas y comenzarán a enviarse este 20 de marzo.
La compañía francesa ha resaltado en su mensaje que «desde el inicio de esta crisis, hemos hecho todo lo posible para que nuestros clientes puedan proteger su salud». Las instituciones sanitarias galas han dado previamente su autorización a este tipo de autopruebas nasales para que puedan venderse en las farmacias o en los supermercados que las adquieran.
«Mientras que Europa avanza en este sentido, España vuelve a quedar fuera de esa posibilidad, ya que la comercialización de este tipo de productos queda restringida por ley al ámbito sanitario. Una vez más, la realidad va muy por delante de las decisiones políticas y la voraz burocracia nacional, como ya hemos visto en numerosas ocasiones durante la pandemia y tal y como el sector de la distribución no se ha cansado de denunciar con el caso, por ejemplo, del suministro de vacunas en los supermercados», destacan desde Food Retail.