Miguel Ángel Revilla, presidente de la comunidad de Cantabria, fue protagonista este pasado jueves de un nuevo incidente relacionado con la hosteleria al ser grabado tras haber presuntamente comido y fumado un puro en el interior de un local, algo prohibido por las actuales restricciones que sufre el sector hostelero en Cantabria, un sector que lleva semanas protestando contra el Gobierno autonómico por las restricciones para frenar la pandemia.
Una de las medidas más criticadas ha sido la del cierre del interior de locales. Por ello, un grupo de hosteleros grabó e increpó al presidente cántabo a quien le acusaron de haber estado comiendo en el interior de un restaurante ubicado en la calle Castelar de Santander.
Tanto Miguel Ángel Revilla, como responsables de la empresa lo negaron, y se excusaron alegando que el lugar está considerado como una terraza, por lo que sí estaría permitido consumir en el interior.
Revilla mantuvo que se trataba de una comida de trabajo con los máximos representantes de una «importantísima empresa de Cantabria y que el espacio estaba perfectamente autorizado». La empresa hostelera, por su parte, explicó que la estancia dispone de ‘techo abierto’, por lo que cumple las exigencias de ventilación.
El vídeo se hizo viral ayer viernes en redes sociales y el incidente provocó revuelo en la calle. Al salir del restaurante, varios hosteleros que se percataron de la presencia de Revilla le reprocharon que incumplía sus propias medidas.
Revilla negó categóricamente que el puro que aparece en el vídeo sobre la mesa se lo hubiese fumado él. Han sido varios los diputados cántabros que han solicitado la comparecencia de Revilla ante el parlamento a causa del incidente.