•EL PLUMAS
En el callejón anteriormente sito en el actual “Pasaje Adarve”. Apaños y venta de plumas estilográficas. Se hicieron muy populares sus polémicas a voz en grito con “El Hércules” vecino con tinglado editorial a la intemperie en la plaza de Joufré, junto al Bazar Murciano de don Ricardo Blázquez.
•EL BARQUILLERO
•EL PARES O NONES
•EL VENDEDOR DE TORTUGAS
•EL VENDEDOR DE PIÑONES
•EL HÉRCULES
•TOSTONES (HOY POP CORN)
•EL LIMPIA
•LOS TRATANTES
•PAJES DE REYES
•EL ORGANILLO
•LA CASTAÑERA
•VIOLETAS IMPERIALES
•EL VENDEDOR DE COCOS
•DON PACO EL DEL VIEJO DREXCO (EL CÓRDOBA Y EL BARBA Y TOMÁS EL DE LOS PEQUEÑOS)
Casa fundada por don Andrés Sevilla y don Francisco Vivancos, quedando posteriormente como único propietario el entrañable don Paco (conocido por su volumen físico que le hacía ocupar dos taburetes en la barra del establecimiento de su propiedad). Personal elegantemente uniformado de chaleco negro con solapas rojas, a juego con las mesas de la terraza. Córdoba (era cordobés; en los nuevos tiempos del local, inmortalizado en figura de cartón piedra) y Barba atendían la terraza; al grifo de la cerveza en barra Tomás el de los Pequeños. Un snak-bar americano en el cogollo de la Murcia recoleta y provinciana. Un lugar con aires de rebotica en la madrugada, reconocidas eran sus timbas de póker. Frecuentado por tiples y vicetiples de las compañías de revista y gentes de la farándula con actuación en el teatro Romea. Inmensas fueron sus patatas fritas servidas en higiénicas bolsitas de papel inmaculadamente blanco selladas con grapa. En sus últimos tiempos la presencia de José Ramón Erviti, jugador del Real Murcia; del púgil Rafael Martínez Roldán y del bancario José Reforma se hicieron imprescindibles. Un lugar donde se practicaba el eterno y murcianísimo deporte de ver pasar a la gente. Irrepetible.
•LA DISCRETA VENTA AMBULANTE DE PRESERVATIVOS EN LA MURCIA DE LA MORALIDAD
•EL SEÑOR DE LA CABRA
•¡MAMÁ YO QUIERO HACER POMPAS!
•DON RICARDO BLÁZQUEZ Y SU BAZAR MURCIANO
Este popular comerciante nació en el pueblo donde le dio a luz su buena madre, en el día y hora que consta en la fe de bautismo.
Desde los más tiernos meses demostró gran afición a los cuartos… de luna, afición que conserva hasta el presente momento histórico.
Cuentan, que cuando le apuntaron los primeros dientes, prefería una peseta a los amuletos de marfil y a los pedacitos de suela que le colgaban para que se rascara las inflamadas encías.
Sus padres adivinando la vocación de Ricardito, le dedicaron al comercio, embalándolo y facturándolo para Murcia a la orden del Bazar Puxmarina, en donde soltó pronto los andadores. El niño no corría, volaba hasta perderse de vista.
No está averiguado si eso que tiene en la pierna derecha es de algún mal paso; pero lo que está fuera de toda duda es que cojea.
De noche, cuando se retiraba del mostrador y se dejaba caer en el catre, en vez de dormir, pensaba y pensó que un dependiente podría llegar a principal, y eso de principal le gustó mucho.
Le escribió a su tío y su tío le contestó. Y dicho y hecho, se estableció en la Platería con vistas a la plaza de Joufré, donde está el quiosco.
Ricardito se dio tan buena maña que en pocos días llegó a donde no han llegado acreditados comerciantes.
Su carácter jovial y discreto; su amabilidad nunca exagerada, con las señoras; alguno que otro rasgo de esplendidez y su buen gusto en la elección de los géneros, lograron que su establecimiento se viera constantemente concurrido, y que el cajón del mostrador le diera sorpresas agradabilísimas.
Los que se encuentran en el terrible apuro de hacer un regalo de bodas; los que tienen el compromiso de obsequiar a un amigo en el día de su santo; el novio que tiene que dar a la novia una prueba palpable de su amor, y los papás que tienen que feriar a sus nenes de ambos sexos, necesitan recurrir al Bazar Murciano y entenderse con Ricardo, que adivina de lo que se trata y les pone delante de los ojos aquellos objetos que por el gusto y el precio llenan los deseos de la víctima.
La colección de muñecas que ha recibido para la feria le entra a uno en deseos de ser niña. ¡Qué bonitas y qué baratas son! Esto de baratas lo dice Ricardo; quizás los que tengan que comprarlas dirán otra cosa.
Si hemos de creer lo que dicen por ahí, en lo que no tiene rival el Bazar Murciano es en los cubiertos de metal blanco y en el ramo de perfumería. Dicen que no hay señorita de buen gusto que no tenga en su tocador las esencias que por poco dinero les facilita don Ricardo Blázquez. “El Bazar murciano” 1829
LE SIGUEN EN LA PARTE IIª :
- EL CLERO
- ALMENDRAS GARRAPIÑADAS
- EL GLOBERO
- ¡A LA RICA FRESA!
- ROMERO EL DE LA COVACHUELA
- TERTULIANOS DE CASINO
- LAS GUAPAS
- CUPÓN DE CIEGOS
- EL GATO NEGRO
- EL SEÑOR DE LA CABRA
- LUCIENDO PALMITO
- LOS ÚLTIMOS SOMBREROS
- EL CHAMBILERO
- BUSCANDO NOVIO
- LA EDAD DEL PAVO
- LOS MUJERIEGOS
- LOS CADETES
- SINGULARES AGENTES INMOBILIARIOS
- TAURINOS
- WILLIAMS, UN NUEVO LOCAL CON RAÍCES TRADICIONALES
- VIUDAS
- LA VIÑA BAR DE DON PACO
- HISPANO Y EL NUEVO ESTILO
- SIRVENT EL DE LAS CUATRO ESQUINAS
- PELUQUERÍA CAMPILLO, UN POCO MÁS ALLÁ
- LA TERCENA
- LOS ARTISTAS CAMINO DE CHYS
- PANADERÍA GUILLÉN Y SUS TORTAS DE CHICHARRONES
- CONFITERÍA BARBA AL DOBLAR LA ESQUINA
- LA LECHERÍA DE CARMEN
- PLUMAS LÓPEZ
- HIJOS DE ANTONIO ZAMORA
- ULTRAMARINOS FINOS
- LOS SUCESORES DE NOGUÉS
- DON JOSÉ VALVERDE DÍAZ “EL PICHILATE” UNA PERSONALIDAD APARTE
- FOTOS LÓPEZ
- LA LIBRERÍA GENERAL
- JOYAS PARA TODAS LAS ECONOMÍAS
- LOS PORTALES
…Y DESPUÉS LE SIGUE LA PARTE IIIª
Miguel López-Guzmán
Periodista y escritor
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