A los 79 años de edad, ha fallecido Luis Nondedeu, figura inmensamente influyente en el ámbito culinario alicantino, dejando un legado imborrable en la memoria del sector como un creador, innovador y, sobre todo, «una gran persona». A finales de la década de los 80, su establecimiento emblemático, el Bar Luis, introdujo en Alicante ingredientes y técnicas culinarias prácticamente desconocidos hasta ese momento, como el foie gras. Posteriormente, desempeñó el rol de maestro para varios cocineros, entre ellos Dani Frías y Nazario Cano, mientras ejercía como formador en el Cdt de Alicante.
Sus primeros pasos en la hostelería los dio siendo aún joven, trabajando como freganchín en el bar «Montana«, donde uno de sus hermanos mayores laboraba. También tuvo la oportunidad de trabajar en la icónica cafetería «Nevada«, donde conoció a su futura esposa, Sara.
En el comienzo del año 1976, inauguró el Bar Luis en el número 23 de la calle Toledo, la misma calle donde vino al mundo. En este establecimiento, se entregó completamente a su pasión por la cocina. Fue en este lugar donde introdujo a Alicante ingredientes y preparaciones prácticamente desconocidos, como el foie gras. La calidad de su oferta atrajo a una clientela fiel, y su local, que reformó en poco tiempo, se convirtió en un punto de referencia gastronómico.
Luis también asumió el rol de profesor de cocina en el Cdt de Alicante hasta 1988, año en el que se vio obligado a cerrar su negocio y suspender sus clases debido a problemas de salud. En años posteriores, regresó a las cocinas de lugares prestigiosos como el «Devachan» en el hotel Meliá Altea Hills, así como en restaurantes como «El Portó«. Eventualmente, se retiró en 2009 después de una exitosa etapa en el «Rincón de Capis«, en Torrevieja. Su legado perdurará en la escena culinaria alicantina como un verdadero ícono de la innovación y la pasión por la gastronomía.
Luis Nondedeu: Trayectoria Culinaria y Legado en la Gastronomía Alicantina
Luis Nondedeu, originario de Alicante y nacido en 1944, marcó un hito en la escena gastronómica de la ciudad desde sus inicios. Su historia comenzó en el Barrio de Santa Cruz, donde en 1976 abrió el Bar Luis, una modesta cantina que se convirtió en el epicentro de sus aspiraciones culinarias.
Desde temprana edad, Luis se involucró en el mundo de la hostelería, trabajando como camarero en diversos locales de Alicante desde los 14 años. A pesar de que la cocina era su verdadera pasión, esta vocación se mantuvo en el trasfondo debido a la falta de oportunidades. Sin embargo, el destino lo condujo hacia el Bar Luis, un local que le brindó la oportunidad de dedicarse plenamente a su amor por la cocina.
En los años posteriores a su inauguración, Luis transformó por completo el establecimiento, introduciendo elementos innovadores en la escena culinaria alicantina de los años 80. Incluyó ingredientes poco comunes en la región como el foie gras, los patés, los quesos artesanales y las ostras. Además, apostó por cervezas europeas y una cocina que reflejaba las tendencias culinarias de la época. A partir de su formación autodidacta, adquirida a través de la experimentación y la asimilación de técnicas aprendidas de libros de recetas, Luis creó platos únicos, como la flor de calabacín rellena de brandada de bacalao, erizos gratinados con cava, merluza en salsa de erizos, magret de pato relleno de foie con higos y tarta de marrón glacé.
En 1993, el Bar Luis se trasladó a un nuevo local contiguo al original y evolucionó en un restaurante de tres plantas: barra, bodega y comedor. Continuó siendo un punto de encuentro para amantes de la buena comida, intelectuales y artistas. El distintivo logo del Bar Luis, creado por Josep Mª Civit (Taula de Disseny), se convirtió en un símbolo de la escena postmoderna de Alicante.
Durante su última etapa, Luis se convirtió en profesor de cocina en el Centro de Turismo de Alicante (CdT) desde 1996 hasta 1998. Sin embargo, problemas de salud y otros factores lo llevaron a cerrar su restaurante y abandonar la enseñanza. A pesar de ello, no se alejó del mundo culinario y asumió roles de chef en diversos hoteles y restaurantes en La Marina Baixa. Finalmente, se incorporó a la cocina del Rincón de Capis en Torrevieja, donde se retiró en 2009, dejando una huella imborrable en la escena gastronómica alicantina.
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