Del 26 al 28 de octubre, el Centro de Cualificación Turística acoge a 50 futuros referentes de la hostelería española en un laboratorio vivo de creatividad, gestión y valores humanos
Entre fogones, salas de cata y aulas de innovación, Murcia se prepara para albergar del 26 al 28 de octubre la segunda edición del Campus Gastronómico Talento Joven, un encuentro formativo pionero que reúne a medio centenar de estudiantes de hostelería procedentes de 15 escuelas de toda España. Organizado por la plataforma Gastroactitud con el respaldo del Gobierno de la Región de Murcia, el evento transformará el Centro de Cualificación Turística (CCT) en un auténtico laboratorio interdisciplinar donde la cocina se entrelaza con la psicología, el marketing, la sostenibilidad y la ética profesional.
Murcia se convierte en crisol de la nueva generación gastronómica
Tras el éxito de su primera convocatoria —que contó con figuras como Ferran Adrià o Dabiz Muñoz—, esta nueva edición eleva su ambición al incorporar un elenco de mentores de primer nivel internacional, encabezado por Joan Roca, chef del legendario El Celler de Can Roca; Toni Nadal, histórico entrenador de Rafael Nadal; y Marta Campillo, jefa de sala del tres estrellas Michelin DiverXO. Juntos, representan tres pilares fundamentales del éxito: la creatividad culinaria, la disciplina personal y la excelencia en el servicio.
El Campus no se limita a enseñar técnicas, sino que propone una visión integral del sector, abordando tanto los triunfos como los fracasos como parte esencial del crecimiento profesional. Durante tres jornadas intensas, los participantes trabajarán en equipos multidisciplinares sobre cinco ejes fundamentales: cocina, sala, gestión, investigación y producto, guiados por una combinación de mentores senior y jóvenes referentes emergentes.
Cada grupo, compuesto por diez alumnos de distintas regiones —desde Cataluña hasta Canarias, pasando por Galicia, Madrid o el País Vasco—, deberá resolver retos reales del sector: desde el aprovechamiento íntegro del pescado hasta la fidelización de equipos, pasando por el uso de inteligencia artificial en la innovación gastronómica o estrategias de marketing para productos locales.
La programación incluye clases magistrales abiertas al público, talleres prácticos y actividades complementarias que conectan la gastronomía con el territorio murciano. Destacan un ronqueo de atún a cargo de la empresa Ricardo Fuentes e Hijos, una visita al centro de I+D de semillas Sakata y un taller sobre aprovechamiento sostenible del producto con Aquanaria. La inauguración tendrá lugar el domingo en la Sala de Cata de Estrella de Levante, en un acto que simboliza la fusión entre tradición cervecera y vanguardia culinaria.
Más allá de las estrellas Michelin y los nombres ilustres, el alma del Campus reside en su enfoque humano. Toni Nadal trasladará al ámbito hostelero los valores del deporte de élite: constancia, resiliencia y trabajo en equipo. Joan Roca compartirá su visión de una cocina comprometida con la sostenibilidad y la empatía. Y Marta Campillo reivindicará el papel de la sala como eje narrativo de la experiencia gastronómica, no como mero acompañamiento.
El elenco de expertos se completa con figuras como José Carlos Capel (presidente de Madrid Fusión), Mónica Rius (Michelin), Inmaculada Puig (psicología organizacional), José Miguel Herrero (Alimentos de España) y Carlos Pérez (Juanito Baker), entre otros, garantizando una perspectiva transversal que va desde la crítica hasta la gestión empresarial.
La consejera de Turismo, Cultura, Juventud y Deporte, Carmen María Conesa, subrayó la importancia estratégica de esta iniciativa: “Murcia no solo apuesta por el talento joven, sino que se posiciona como referente nacional en formación gastronómica, un sector que genera 48.000 empleos en la Región y moviliza más de 700 millones de euros anuales en gasto turístico”.
Con este Campus, la Región refuerza su identidad como destino donde tradición, innovación y producto local convergen para formar a los líderes del mañana. Porque, como bien se entiende en estas aulas efímeras, la verdadera gastronomía no se mide solo en platos, sino en personas, valores y sueños compartidos.
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