Una nueva alerta alimentaria ha saltado en Europa. El sistema de Alerta Rápida para Alimentos y Piensos (RASFF) ha ordenado la retirada de unas sandías procedentes de Marruecos por contener trazas de un pesticida llamado metomilo, que puede tener efectos nocivos para la salud. Según ha informado la organización de consumidores FACUA, las frutas tenían una concentración de este insecticida que superaba el límite máximo establecido por la UE.
El metomilo es una sustancia que se usa para combatir las plagas de insectos en los cultivos, pero que puede causar intoxicación si se ingiere en altas dosis. Los síntomas de esta intoxicación pueden ser dolor de cabeza, mareos, náuseas, vómitos, sudoración excesiva, temblores, debilidad muscular y visión borrosa.
Las sandías afectadas fueron detectadas por el RASFF, que calificó la incidencia de “grave” y alertó a las autoridades nacionales competentes. En España, la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) es la encargada de gestionar estos avisos y de verificar la distribución y el destino de las frutas contaminadas.
FACUA recomienda a los consumidores que hayan comprado sandías procedentes de Marruecos que comprueben su origen y su lote, y que en caso de duda se abstengan de consumirlas. Asimismo, aconseja que ante cualquier síntoma sospechoso se acuda al médico y se informe del posible contacto con el pesticida.