La Policía Nacional ha confirmado la detención de dos individuos en relación con el incendio ocurrido el pasado 1 de octubre en dos discotecas de la zona de ocio de Atalayas, en Murcia, que resultó en la trágica pérdida de trece vidas.
Según fuentes cercanas al caso, los arrestados, identificados como el gerente y un empleado de uno de los locales afectados, estarían involucrados en la introducción de una caja de fuego frío (bengalas) que habría originado el siniestro. El individuo que presuntamente llevó a cabo la acción sería el empleado, mientras que el gerente sería el responsable de la discoteca Fonda Milagros, una de las afectadas, según publica La Opinión.
Después de declarar, el propietario y gerente de Fonda Milagros fue liberado bajo fianza, según las mismas fuentes. La detención tuvo lugar durante esta semana por parte del Grupo de Homicidios de la Policía Judicial de la Policía Nacional en Murcia. Los sospechosos enfrentan cargos por trece homicidios por imprudencia, con penas estipuladas en el Código Penal que van de uno a cuatro años de prisión, sujetas a variaciones según las circunstancias.
Las investigaciones policiales señalan que la caja de fuego frío, presuntamente adquirida por Internet y no homologada, fue el punto de inicio del incendio que resultó en las trágicas pérdidas. Aunque la Policía de Murcia sostiene esta teoría, la Policía Científica de Madrid aún no ha entregado oficialmente su informe.
El abogado de La Fonda Milagros niega la detención del dueño y gerente, afirmando que este fue citado como investigado y declaró voluntariamente este viernes, colaborando con la Policía. Señala que la citación sigue el protocolo policial, que incluye la toma de fotos y huellas para los investigados. La Policía Nacional oficialmente informa sobre las dos detenciones en curso, mantiene abiertas las investigaciones y no descarta futuras detenciones, aunque no proporciona detalles adicionales.