La prestigiosa Guía Michelin actualizó este martes sus Estrellas en una gala que vio cómo la Región de Murcia, prácticamente, perdía uno de sus preciados astros culinarios.
Si el año pasado eran cuatro los restaurantes murcianos reconocidos por la guía francesa, desde entonces ha habido una «baja», y ahora son tres los que persisten en el ansiado firmamento.
La escena gastronómica regional no logró ayer ninguna nueva Estrella Michelin, todo lo contrario, se esfumó la conseguida por Odiseo tras la marcha de Nazario Cano y es que la Región de Murcia se enfrentaba ayer gastronómicamente a un desafío significativo en la nueva entrega de la gala de la Guía Michelin España.
Habían sonado varios nombres como Marco Antonio Iniesta, chef, y María Egea, jefa de sala de Frases e incluso Sergio de La Orden, de El Mosqui, pero no fue posible anoche. El chef alicantino Nazario Cano elevó el listón en 2020 al lograr la que significaba (entonces) cuarta Estrella michelín para Murcia en solo unos meses al frente de la cocina del Centro de Ocio Odiseo, en Churra. Sin embargo, el año pasado, Juan Guillamón y el restaurante AlmaMater sumaron la quinta, situando al sector hostelero murciano en uno de los momentos más destacados de su historia. No obstante, en septiembre pasado, Nazario anunció su «hasta luego», un adiós que mermó considerablemente las posibilidades de la comunidad de mantener esas cinco Estrellas. Y anoche, no hubo sorpresas.
La Región celebró la permanencia de AlmaMater, Magoga y La Cabaña Buenavista en el firmamento de la Guía Michelin, aunque este último, liderado por Pablo González-Conejero, mantuvo sus dos Estrellas. No obstante, la Región de Murcia perdió uno de esos preciados astros en el Auditori Fòrum del Centro de Convenciones Internacional de Barcelona.
La Cabaña Buenavista de Pablo González-Conejero mantuvo sus dos Estrellas Michelin, mientras que Magoga, con María Gómez al frente, y AlmaMater, de Juan Guillamón, siguen atesorando una Estrella cada uno.
No obstante, la partida del chef alicantino Nazario Cano, que obtuvo una Estrella en 2020 al dirigir la cocina del Centro de Ocio Odiseo, en Churra, marcó la pérdida de un poco de brillo en la alta cocina regional.
En resumen, la gala de la Guía Michelin fue una noche de luces y sombras para la gastronomía murciana, destacando la persistencia de tres restaurantes en el selecto grupo de establecimientos premiados.