El presidente de Hostemur, Jesús Jiménez Avellaneda, no cree suficientes las palabras de apoyo a la hostelería pronunciadas ayer por el presidente de la Comunidad Fernando López Miras en las que pedía el apoyo de toda la sociedad murciana para salvar al sector con las nuevas restricciones.
«Bonitas palabras de apoyo, pero no necesitamos palabras necesitamos hechos», ha declarado esta mañana el presidente de Hostemur, Jesús Jiménez Avellaneda, a LasGastrocronicas.com. «Lo que es increíble es que en verano cuando estábamos mejor y con buen tiempo nos deja el 75% en las terrazas y ahora con el frío el 100%».
Jesús Jiménez destacó que en el discurso de ayer de López Miras «no lo he escuchado decir algo sobre la reducción de alquileres al 30%, de la exención de impuestos y tasas, de la devolución de los pagos a cuenta del impuesto de sociedades, de la ampliación de la moratoria de los icos, de no pagar las seguridad social de los ERTEs, etc… Es que me fui un rato al aseo y por si me lo perdí esa parte de la declaración», bromeó.
El presidente de Hostemur califica la decisión de López Miras de declarar el toque de queda en la Región de Murcia de 23 a 6 horas como «una medida desproporcionada para un sector que no levanta cabeza. Después de esto nos condenan al cierre y a la no supervivencia de muchos negocios. Indignante».
«Esa hora de diferencia hará que los restaurantes pierdan las cenas, lo que supondrá una caída de los negocios del 35% o el 45% en la facturación diaria. 85.000 locales bajarán la persiana a finales de año y provocará la pérdida de empleos directos e indirectos de 1,1 millones, que representa el 6,2% del PIB. Con respecto a 2019, ya se ha producido un descenso de la facturación de un 50% y una pérdida de 67.000 millones de euros», declaró este fin de semana el presidente de Hostemur.
Y es que entre las medidas acordadas acordadas ayer tarde, destaca el levantamiento de las restricciones en las terrazas de los establecimientos, que podrán ocuparse al 100%, y la prohibición de comer y beber en espacios públicos. El consejero de Salud, Manuel Villegas recomendó a los ayuntamientos la ampliación de los espacios disponibles para las terrazas. Mientras tanto, Salud anunció la reducción de la ocupación máxima en el interior de los bares y restaurantes al 30%. El consejero de Salud advirtió que «cuando las personas estén sentadas en una terraza, mientras no estén consumiendo deben estar con la mascarilla puesta. Si hablamos sin mascarilla estamos contagiando a la persona que tenemos al lado».
«Con la bajada de temperaturas no servirá para nada permitir el aforo al cien por cien en las terrazas».
El malestar tras las nuevas restricciones acordadas ayer es evidente en los presidentes de las patronales Hostemur y Hostecar, quienes creen que larestricción de aforo al 30% en el interior de los bares y restaurantes supone un nuevo varapalo para el sector, que, según el presidente de Hostemur, les va a «abocar a la quiebra», al igual que el toque de queda declarado. de 23 a 06 horas, con el estado de alarma.
A pesar de que las terrazas estaban restringidas al 75% del aforo y ahora podrán abrirse sin ninguna limitación, los hosteleros consideran que esta medida no tendrá ningún efecto positivo se avecina la temporada invernal y la bajada de las temperaturas provocará que los clientes prefieran quedarse en casa y no estar en una terraza.
Jesús Jiménez, considera que «la decisión que se ha tomado debe estar basada en un conocimiento superior, en criterios que desconocemos», y criticó que se califiquen de «pataleta» las quejas de los hosteleros. «No se puede decir que es una pataleta intentar salvar nuestros negocios», reivindicó el presidente de Hostemur.
Toque de queda
Respecto al toque de queda, destacó que lo que va a impedir es que la gente pueda salir a cenar. «Si obligamos a los bares y restaurantes a cerrar antes de las 23.00, también se debería cambiar el horario laboral y que la gente saliese de trabajar a las cuatro de la tarde; o cambiar el horario comercial y que cerraran a las seis de la tarde», ha declarado Jesús Jiménez al diario La Opinión.
El presidente de la Región, Fernando López Miras incluyó en su discurso palabras de apoyo al sector de la hostelería y animó a los ciudadanos a consumir para salvar la economía. Sin embargo, Jiménez le ha contestado que «las palabras bonitas sirven de poco, lo que necesitamos son soluciones».
Juan José López, presidente de Hostecar, la patronal hostelera de Cartagena, ha destacado que en el sector existe la sensación de que las nuevas medidas no están justificadas porque no existen datos que demuestren que los contagios de esta segunda ola se produzcan en mayor medida en la hostelería. «Los empresarios del sector han cumplido y han aplicado siempre las medidas que nos han recomendado. No se entiende que todas las medidas vayan en contra de nuestro sector, porque si, como se ha propuesto, esto se alarga hasta mayo, para muchos negocios va a ser muy difícil subsistir», añadió.
El presidente de Hostecar cree que el toque de queda perjudicará en mayor medida a los bares y restaurantes de la costa, porque «si a las once de la noche tienes que estar en casa, no te puedes desplazar para irte a cenar, sino que solo puedes acudir a lugares cercanos». Por tanto, sostiene que los locales de La Manga, Cabo de Palos y demás pueblos costeros de la comarca de Cartagena podrían verse afectados.
Juan José López discrepa de Jesús Jiménez y dice no creer que la solución pase por medidas de compensación para el sector. «Algunos negocios no pueden subsistir con 1.000 o 2.000 euros de ayudas. Nosotros lo que pedimos es trabajar», afirma.