Juan García García, de apodo ‘Romero‘, el padre de los hermanos José María (Pepe), Saturnina y Elena García Vivancos, abrió junto a su mujer Isabel, en el año 1995 la conocida ‘Venta Romero‘, en la carretera de Alhama de Murcia a la altura de Cuevas de Reyllo, al noroeste del municipio de Fuente Álamo de Murcia y esos fueron los orígenes de la emblemática cafetería de Fuente Álamo, ‘Comienza la Leyenda‘, un establecimiento hostelero con encanto que, además de un épico nombre, cuenta con una sorprendente decoración y una amplísima gastronomía basada fundamentalmente en su gran surtido de ‘punticas‘, tostas y canapés de los que elaboran hasta 77 variedades diferentes.
Y es que de casta le viene al galgo ya que son la tercera generación que se dedica a la hostelería desde que comenzase a hacerlo su abuelo, Pepe Romero, con su tienda de ultramarinos y bar. Los hermanos García Vivancos regentan el popular y aplaudido negocio de Fuente Álamo desde 2005.
Cuando llegamos a las puertas de la cafetería, nos sorprenderá que no encontremos ningún gran rótulo con el nombre del restaurante que solamente veremos, colocado en la pared, en forma de lápida de piedra esculpida, con un escudo de armas en el que aparecen tres coronas, colocado en su fachada. El escudo a la entrada y el épico nombre de ‘Comienza la Leyenda’ nos podría hacer imaginar que la decoración del local estaría ambientada en una época histórica como la Edad Media, y para nada… Nada más entrar creeremos que hemos hecho un viaje de más de 7.000 kilómetros, cruzando el océano, y de repente nos encontramos en el interior de una auténtica cafetería cubana de estilo colonial a la que no le falta ni un detalle para teletransportarnos al Caribe. «Comienza la Leyenda» fue como decir «empezar de nuevo», nos explican.
El local cuenta con unos 150 metros cuadrados y tiene capacidad para atender a medio centenar de comensales y disponen de una terraza cubierta que usan por las mañanas. Cuatro columnas centrales, sillones semicirculares con 9 mesas redondas, ventiladores de techo, artísticas lámparas, paredes de madera y fotografías de La Habana en sus paredes completan la decoración del salón y la amplia zona de la barra, por donde se mueven con gran profesionalidad el equipo de ‘Comienza la Leyenda’, capitaneado por Pepe, con su mujer María Ascensión Pérez Hernández, junto a Josefa, Elena, José Eugenio ‘El Nervios’ y en la cocina Mari, Maruja y Paqui.
Nunca han tenido carta al uso, «vendemos lo que queremos», explica divertido Pepe, quien nos cuenta que la gastronomía que ofrecen «es lo que a mí me gustaría comer cuando voy a algún lado y del mismo modo tratamos a nuestros clientes de la misma manera que nos gustaría que nos tratasen a nosotros, esa es nuestra clave. Sin mis trabajadores yo no soy nadie», destaca Pepe.
Entre su amplia lista de ‘punticas’ (bocadillos) y canapés, destacan ‘el grasiento’, de lomo a la plancha, tomate con ajo mahonesa y tocino ibérico a la plancha; el de foie; el de pimientos de piquillo, atún, mayonesa, tomate y anchoas; o el de jamón serrano, tocino ibérico a la plancha con pan tostado y tomate; el de pan Bimbo con queso, jamón y tomate; el de guacamole; el tomate con sardina en salmuera, o el de paté de pato con mermelada de plátano, kiwi y pera.
Gastan todos los días entre 200 y 300 barras de pan y sirven medio millar de almuerzos.
Entre sus platos estrella también encontramos los jueves su afamado guiso de rabo de toro, con más de cuatro horas de cocción, su pastel de puerros casero, su atún de ijada con tomate frito y su ternera a la parrilla. También son muy aplaudidas sus empanadillas fritas de las que elaboran no menos de 150 diarias.
Cuentan con menú diario por 13 euros, con dos platos, café bebida y ensalada y entre sus postres destacamos el de crema de almendras hecho por María Ascensión, la mujer de Pepe, quien nos explica que estudió informática y trabajó seis meses para ITT. Pero por lo que realmente es conocido Pepe es por su etapa como ‘Dj Coco’ en los años 90 en la mítica Excálibur de Fuente Álamo, con Diego Conesa, Benito, Juanjo, Domingo y el jefe Perico. Una afición que continúa hasta hoy y con la que ha triunfado en redes sociales en los días de la pandemia.
Y para terminar, además de asiáticos, no debemos dejar de probar su especial ‘Café quemao’, muy típico en las antiguas matanzas de la zona.
Un momento sorprendente de su horario es que después de abrir desde las 6.30 h de la mañana, a las doce en punto, después de los desayunos y almuerzos, todos los clientes salen del local sin que nadie les avise porque saben que cierran durante dos horas para limpiar y vuelven a abrir a las dos de la tarde para las comidas.
Comienza la Leyenda
- Dirección: Calle del Sauce, 42 y calle del Tilo, 2. Fuente Álamo.
- Horario: de 6.30 h. a 16 horas, de lunes a sábado. Cierra domingos, festivos y 20 días en agosto.
- Precio medio: 30/35 euros.
Guiso de rabo de toro
Ingredientes:
- Agua
- Rabo
- Tomillo
- Sal
- Tomate frito
- Puerros
- Vino blanco
- Vino moscatel
- Caldo de carne
- Cebolla
Elaboración:
Se coge el rabo y se cuece, en un cazo lleno de agua, durante más de una hora.
Sofreír la cebolla con el tomate añadiéndole vino blanco, vino moscatel y sal al gusto.
Se le añade un caldo de carne.
Puerros, usamos uno por cada kilo de rabo y añadimos tomillo. Todo eso se le añade el rabo ya cocido y después de otra hora cociendo, dejar reposar por lo Menos 10 horas y después calentar y servir. Buen provecho.
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